¿Si un órgano se daña puede esto afectar a nuestro comportamiento?
Ciertos órganos de cuerpo humano son meramente importantes en este. Esto es debido a que se encargan de funciones de gran importancia, sin las que el ser humano no podría vivir. Hay algunos órganos que tienen función simplemente anatómica y que si este deja de funcionar o es dañado, no producirá cambios más allá de los daños que haya podido sufrir este, deteriorando así sus funciones pero sin provocar cambios psicológicos en una persona. Esta premisa no se cumple en todos los casos, como en el caso del cerebro. El cerebro es uno de los órganos más importantes en el ser humano, ya que les permiten realizar determinadas funciones desde las más simples y automáticas a las más complejas y autoconscientes. Si este órgano se llegara a dañar no solo se verían perjudicadas sus funciones si no que podrían llegar a producir cambios en el comportamiento, cognitivos o en la personalidad. Esto ha quedado demostrado en distintos casos a lo largo de la historia, en el que destaca el de Phineas Gage.